Hola compañeros, muchachos y estudiantes, en este blog podremos opinar, debatir, publicar trabajos y enlaces de interés para todos nosotros sobre temas relacionados con la ecología, el medio ambiente, problemáticas presentes en este y posibles soluciones a todas ellas.
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El cambio climático también puede mirarse como un negocio o una estrategia en tiempos de crisis
ResponderEliminarEso es lo que está haciendo más de un centenar de empresas colombianas, que han comenzado a desarrollar proyectos de Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL), avalados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Con ellos, pretenden reducir la contaminación atmosférica que producen, para luego vender cada una de las toneladas de gases de efecto invernadero (GEI) mitigadas en el mercado mundial, y sacar utilidades. Entre esas sustancias están el dióxido de carbono y el metano.
Colombia es el undécimo país con la mayor cantidad de firmas vinculadas con iniciativas MDL, tema que será analizado desde este jueves en el III Congreso Internacional de Medio Ambiente, que organizan la Universidad de los Andes, Andesco, entre otras firmas, con el apoyo de EL TIEMPO.
Corporaciones autónomas, ingenios y cementeras impulsan hoy 152 planes de mitigación. En el 2007, esos proyectos no superaban el medio centenar.
Entre todas, esperan obtener 150 millones de dólares en ganancias, por reducir un poco más de 19 millones de toneladas de gases de efecto invernadero al año.
ResponderEliminarLa idea es que, por cada tonelada, la ONU les expida Certificados de Reducción de Emisiones (CER), que se convertirán en títulos o bonos avaluados entre 5 y 15 dólares aproximadamente, y que podrán vender a los países industrializados, como Australia, Canadá o España, estados obligados, por el Protocolo de Kyoto, a bajar sus emisiones de GEI.
De esta forma, a la hora de rendir cuentas sobre sus niveles de reducción, esas naciones dirán que compraron los certificados y aportaron para disminuir la contaminación.
Cementos Argos, por ejemplo, está trabajando en la reforestación de más de tres mil hectáreas de terrenos, que involucran plantaciones que pueden capturar 22 mil toneladas de dióxido de carbono al año.
Otras tienen como enfoque el cambio de tecnología, la sustitución de combustibles y la eficiencia energética.
Una de ellas es Fedepalma, que diseñó el proyecto de captura de metano más grande del mundo, con el manejo de sus aguas residuales. Por eso, las 32 empresas del gremio esperan obtener 757 mil certificados, que en el mercado internacional les pueden representar ingresos superiores a los 3 millones de dólares.
De los 152 proyectos MDL colombianos en marcha, 24 ya fueron registrados ante la ONU (previa revisión nacional) y ocho ya han logrado la aprobación de la organización para emitir y vender los primeros certificados, informó el Grupo de Mitigación de Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente.
ResponderEliminarEntre estas últimas figuran Gas Natural y la Empresa de Acueducto de Bogotá (con la Central Hidroeléctrica de Santa Ana), a las que se ha unido Empresas Públicas de Medellín (EPM) con la generación de energía a través del viento que llega desde el Cabo de la Vela, en La Guajira, y dentro del Parque Eólico Jepírachi. El último en lograr este paso fue el Proyecto Hidroeléctrico La Cascada, una pequeña central ubicada en San Roque (Antioquia).
Expertos critican este modelo porque consideran que los países desarrollados, al comprar los bonos, no se interesan por descontaminar sus territorios y delegan esa responsabilidad en las naciones que ponen en marcha los MDL. Sin embargo, los países en desarrollo sí ven en esta figura una oportunidad para conseguir recursos con el fin de que las comunidades reciban apoyo financiero y no caigan en la tentación de talar más bosques para ampliar sus tierras cultivables.
Y aunque son proyectos que requieren tiempo para consolidarse (dos años en promedio) y la aplicación de tecnologías de punta con inversiones superiores al millón de dólares, ya se han vuelto una alternativa para dejar de ver el cambio climático como una tragedia y transformarlo en una oportunidad.